Muchas personas interesadas en nuestros tratamientos nos preguntan acerca de las diferencias y similitudes entre la ketamina y la esketamina. Aunque podría decirse que son dos compuestos similares ya que comparten raíces farmacológicas y ambos han demostrado ser valiosos en el tratamiento de diversos trastornos mentales, incluyendo la depresión resistente al tratamiento, se sabe que existen algunas diferencias en términos de formulación, administración y perfiles de efectos secundarios.
Ambos compuestos actúan sobre los receptores de glutamato en el cerebro, pero difieren sutilmente en algunos de sus mecanismos precisos. Es esencial que los pacientes y los profesionales de la salud estén bien informados sobre estas distinciones para tomar decisiones fundamentadas en el diseño de tratamientos personalizados.
La ketamina es un medicamento que se utiliza desde hace más de cinco décadas principalmente como anestésico, pero también ha mostrado efectos interesantes como línea de intervención de la depresión resistente al tratamiento y otros trastornos psiquiátricos administrada de diferentes maneras. La ketamina existe en dos formas estereoisoméricas: la forma R-ketamina y la forma S-ketamina (esketamina). Lo que significa que tienen la misma fórmula molecular, pero difieren en cómo están dispuestos sus átomos en el espacio tridimensional. La ketamina sintetizada en 1962 por Calvin Stevens, denominada ketamina racémica, está compuesta por una mezcla de las dos formas estereoisméricas, y es la que usamos nosotros en nuestra clínica. Cuenta con la mayor evidencia de su efectividad en el tratamiento de la depresión resistente al tratamiento dado su larga historia de uso.
La S- Ketamina (esketamina) tiene una mayor afinidad por los receptores NMDA (N-metil-D-aspartato) lo que implica que tiene mayor potencia analgésica y anestésica que la mezcla racémica de ketamina.
Los estudios demuestran que estas diferencias son importantes a la hora de valorar la idoneidad de ambos para el tratamiento de la depresión resistente al tratamiento. Un estudio primerizo realizado en 2015 con ratones adultos comparó los efectos antidepresivos de los estereoisómeros de ketamina (R y S) en los modelos de depresión de estrés por derrota social e indefensión aprendida. Esta investigación puso de manifiesto diferencias a diferentes niveles: mecanismos de acción, efectos secundarios, resultados de mejora y duración de los mismos. Por un lado, los ratones que se les administró S-ketamina (esketamina), pero no R-ketamina, presentaron mayor hiperactividad como efecto secundario. Por otro lado, a la hora de devolverles la capacidad para experimentar placer, interés o satisfacción la (R)-ketamina fue significativamente más potente que la (S)-ketamina (esketamina), un dato de especial interés para pacientes depresivos con anhedonia. Los efectos también fueron más duraderos en la R-ketamina que en los sujetos con S-ketamina (esketamina).
Por otro lado, en otro estudio menciona que la S-ketamina presenta una afinidad aproximadamente cuatro veces mayor por el receptor NMDA que la (R)-ketamina por lo que los efectos anestésicos pueden ser más intensos con la (S)-ketamina. También el estudio mostró una disminución significativa en la capacidad de los receptores dopaminérgicos para unirse a la dopamina en el estriado tras una dosis de (S)-ketamina (pero no de (R)-ketamina), lo que implica un aumento de dopamina en el espació sináptico. Esto puede ser consecuencia de los posibles efectos secundarios psicotomiméticos y disociativos agudos en humanos.
En base a los resultados de las investigaciones anteriores, aunque se sigue manifestando la necesidad de investigaciones rigurosas al respecto, tanto la ketamina racémica como la (R)-ketamina podría tener un efecto antidepresivo más seguro que la (S)-ketamina. Estos resultados se han replicado en varios ensayos clínicos con humanos, aunque todas las versiones de la ketamina han muestran buenos resultados.
En cuanto a los efectos subjetivos, tanto la ketamina racémica como la esketamina tienen efectos disociativos o psicodélicos mayores que la R-ketamina por si sola. En dosis anestésicas, la esketamina parece mostrar efectos más placenteros, con menor letargia, impacto agudo cognitivo y fatiga al despertar. Sin embargo, en dosis subanestésicas hay mayor porcentaje de experiencias no placenteras con esketamina que con ketamina racémica, sugiriendo que la mezcla con R-ketamina ayuda a proporcionar una experiencia psicodélica más placentera.
Por último, existe algo de evidencia apuntando hacia un mayor efecto antidepresivo asociado a los efectos disociativos o psicodélicos de la ketamina, con experiencias ‘místicas’ o espirituales y experiencias que generan menor ansiedad en sesión correlacionadas con la mejora. Es importante continuar investigando esta relación, ya que muchas veces estos efectos disociativos se han denominado efectos secundarios, siendo valorados como efectos no deseados.
Sin embargo, la S-ketamina es la que más prevalece en el mercado de la sanidad con su nombre comercial llamado Spravato. Este fármaco fue creado por Janssen y, por el momento en España solamente está disponible en contextos hospitalarios . El motivo del uso de (S)-ketamina (esketamina) es la diferencia de financiación de estudios finalizados hasta la fase III de los dos compuestos, al ser un compuesto proveniente de una entidad privada el proceso de financiación e investigación ha sido mucho más dinámico y sencillo que para la ketamina racémica.
Es importante mencionar que la investigación en torno a la ketamina racémica, la esketamina está en constante evolución, con estudios continuos que exploran nuevas aplicaciones y refinan los protocolos existentes. A pesar de esto, no deja de existir una necesidad sustancial de financiación para abordar las limitaciones que se encuentran en la reutilización y reconsideración de fármacos y en el progreso de tratamientos prometedores en todas sus fases.
Por ello, nuestra clínica, la cual cuenta con casi dos años de experiencia en Psicoterapia Asistida con Ketamina, dispone de un equipo de profesionales que no solo conoce bien los efectos, beneficios y particularidades si no que cuida por seguir al día con las investigaciones más recientes y cuenta con la experiencia necesaria para este tipo de terapias. Nuestro compromiso es mantenernos actualizados y proporcionar a nuestros pacientes la mejor atención posible, aprovechando los avances en la investigación y la práctica clínica para mejorar la salud mental de quienes confían en nuestros tratamientos.
Nombres comerciales de la Ketamina
Tratamiento con Spravato
Spravato es el nombre comercial de la S-ketamina (esketamina), una de las dos formas de la ketamina utilizadas en el tratamiento de la depresión resistente. En Clínica Synaptica contamos con la posibilidad de trabajar con Spravato, aunque no es la opción más habitual debido a su elevado coste. La evidencia científica muestra resultados similares entre la S-ketamina y la ketamina racémica, que es la que utilizamos principalmente por su eficacia demostrada y su mayor accesibilidad para los pacientes.
Tratamiento con Ketolar
Ketolar es el nombre comercial de la ketamina, un anestésico disociativo de acción rápida cuyo principio activo es el hidrocloruro de ketamina. Si bien su indicación primaria y aprobación es como anestésico general en intervenciones diagnósticas y quirúrgicas que no requieren relajación muscular, la ketamina también ha ganado relevancia en el contexto de la salud mental por su uso en el tratamiento de la depresión resistente. A diferencia de la S-ketamina (esketamina, vendida como Spravato, cuyo uso es más reciente y tiene un coste más alto), Ketolar contiene la mezcla racémica de ketamina completa. Es esta mezcla racémica la que se utiliza habitualmente en diferentes vías de administración (intravenosa, intramuscular, etc.) para el tratamiento de la depresión, dado que la evidencia científica respalda su eficacia y ofrece una mayor accesibilidad para los pacientes en comparación con la S-ketamina pura.
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